EDITORIAL : FUNCIONARIOS MÁS PELIGROSOS QUE LA PANDEMIA

"LAS FUERTES Y CONSTANTES DUDAS QUE RECAEN SOBRE LAS POLÍTICAS CHUBUTENSES ATENTAN CONTRA LA SALUD PSICOLÓGICA DE TODA SU POBLACIÓN"

Son más que tremendas las dudas que existen recayendo sobre los gobernantes Chubutenses debido a sus actuaciones yendo y viniendo por encima de los deseos de sus representados.

Insòlitamente años atrás el origen del gran incendio de Cholila destruyendo fauna y flora fue oficial y ligeramente explicado como que un rayo (en un día de verano con sol ¡?) fuera la causa del inicio. Hasta la fecha de hoy no existieron mas explicaciones, ni se dio a la luz ni al conocimiento público algún trabajo de investigación al respecto por parte de las autoridades chubutenses. Queda pensar que se tapó o no hubo interés en dar respuestas a la población acerca de todas las preguntas que en su momento quedaron fuertemente planteadas.

Ahora (y antes) la minería no querida, explicado por la gente hasta el hartazgo, o el tránsito de Chemtrails diseminando partìculas tòxicas y probablemente inflamables por los cielos cordilleranos (y de todo el país), la variedad de incendios devastadores en cada verano, los trajines económicos y financieros retrasando cobros de sueldos, etc etc. Todo sin responsables, todo sin explicaciones transparentes, todo sin muestras de deseos de investigación, y todo coincidentemente en contra de la madre naturaleza, de la paz social y obviamente de los deseos de la gente.

Son muchos los puntos en consonancia con la negativa de los funcionarios chubutenses a darle y asegurarle el derecho constitucional a un pueblo que solo quiere saber de qué se trata. Dar paz, dar tranquilidad para el presente y para el futuro pareceria no figurar en la agenda de las polìticas oficiales.

Dada esta congruencia recurrente solo queda pensar e inferir dos cosas: Una es que la desidia o irresponsabilidad del gobierno de Chubut es enorme, y la otra es que hay oscuros intereses detrás de tales ocultamientos y falta de respuestas. Cabe señalar que suponer la complicidad del gobierno nacional cae de maduro ya sea por inoperancia o por mala praxis o probablemente por estar motivada en los mismos intereses.

En definitiva no es descabellado sino al contrario entender que la constante exposición a reclamos, a pedidos de informes, a desgastantes asambleas populares, a cortes de ruta u otra clase de medidas, por las cuáles el pueblo pide ser escuchado y tenidoen cuenta, no es más que un atentado contra la salud mental y sicológica de la población chubutense como así de toda la región.

La vorágine de un capitalismo subdesarrollado se demuestra cuando, como en este caso, sirviendo a intereses egoístas de políticos y funcionarios termina atentando no solo a la salud ambiental de este rincón del planeta sino también al bienestar emocional y físico de toda su población. Pensar, reflexionar y desterrar egoísmos puede ser la tarea para el hogar; si Dios quiere, que se lleven nuestros gobernantes en esta pandemia, de lo contrario el futuro cobrarà -tal cual lo está haciendo el presente- su cuenta en salud, en crecimiento y en atraso.